La Parroquia de Nuestra Señora de la Providencia en Floridablanca, Santander, Colombia, ha liderado una iniciativa ambiental conocida como “Adopta un Árbol para el Santuario”. Hablamos con Leonor Esther Ramírez Florez, Coordinadora de Pastoral Ambiental y Animadora Laudato Si’, para conocer más sobre este proyecto y su impacto en la comunidad local.
Descripción del proyecto y motivación parroquial
El proyecto ” Adopta un Árbol para el Santuario” comenzó como una forma de reponer los árboles perdidos durante la construcción del santuario, cumpliendo con los requisitos establecidos por la Corporación para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB). Leonor explicó que la iniciativa pretendía recuperar una zona deteriorada utilizada anteriormente como vertedero, lo que había perjudicado al agua, el aire y el suelo de la zona. “Cuando nuestro párroco nos pidió que lideráramos este proyecto, vimos una oportunidad no solo para reemplazar los árboles, sino también para revitalizar la zona e inculcar un sentido de propiedad y responsabilidad ambiental en la comunidad”, compartió.
Cómo conseguir la ayuda de otros
Uno de los retos más importantes a los que se enfrentó el proyecto fue involucrar a la comunidad y superar la apatía general hacia la conservación del medio ambiente. Leonor y su equipo se dieron cuenta de que necesitaban algo más que acciones físicas; necesitaban inspirar un cambio de mentalidad.
Para lograrlo, organizaron actividades como jornadas de limpieza, invitaron a la comunidad a experimentar el espacio transformado y colaboraron con entidades medioambientales locales para organizar eventos educativos y sociales. Había varias formas de participar. Leonor sugirió correr la voz sobre la iniciativa, visitar el lugar, participar en jornadas de trabajo y, si era posible, contribuir económicamente para desarrollar infraestructuras como senderos, barreras protectoras y señalización. “Cada contribución, grande o pequeña, ayuda a avanzar en la misión de preservar y embellecer este espacio natural”, concluyó.
Impacto en la comunidad
Desde el inicio del proyecto, se ha producido un cambio notable en la actitud de algunos líderes y miembros de la comunidad hacia la conservación del medio ambiente. Leonor destacó cómo muchos se han unido para ayudar en las tareas de mantenimiento, proporcionando mano de obra, herramientas y apoyo durante los días de plantación. “Es alentador ver que la comunidad participa activamente y denuncia las acciones que podrían perjudicar la zona”, comentó. Esta participación ha sido crucial para el éxito y la sostenibilidad del proyecto.
Objetivos a futuro
Aunque el proyecto se planteó inicialmente para tres años, con su finalización en septiembre de 2024, Leonor destacó que el trabajo no termina ahí. “Nuestro objetivo es que la zona sea declarada reserva de bosque de galería y desarrollar un sendero ecológico que sirva de aula viva para los estudiantes”, señaló. Esta ampliación incluye la observación de especies de mariposas, insectos, ardillas y aves, fomentando aún más la educación ambiental y la apreciación de la biodiversidad.
El proyecto ” Adopta un Árbol para el Santuario” es un ejemplo de cómo una comunidad puede unirse para restaurar y proteger el medio ambiente. Centrado en la educación y la participación de la comunidad, este proyecto no sólo beneficia a la naturaleza, sino que también refuerza el tejido social y la conciencia medioambiental de la comunidad.